En estos tiempos tan convulsionados conseguir una plantilla de trabajadores que sean leales a una organización, no es tan difícil de lograr, solo hay que buscar las fórmulas que permitan la satisfacción y el compromiso de ellos para con la empresa.

¿Qué es la lealtad organizacional?
La lealtad organizacional es la capacidad de los trabajadores para mantenerse fieles hacia un determinado proyecto empresarial. Esa competencia va a depender del trato que transmita la empresa hacia sus trabajadores
¿Qué se requiere para que una empresa consiga esa lealtad?
En principio, hay que saber escuchar las necesidades de los trabajadores, ¿qué quieren? ¿Qué aspiran de la empresa?, si lo que se está dando no es ni remotamente lo que aspiran, difícilmente se logre la lealtad. Es cierto que cada persona puede tener aspiraciones diferentes unas de otras, pero saber interpretar las aspiraciones comunes y alinearlas con las de la empresa ayudará a proveer lo pertinente y lograr la cohesión grupal sin descuidar la atención individual, lo cual facilitará el camino para conseguir empleados leales a la misma.

Algunas de las técnicas que pueden servir pueden ser:
- Prestar atención al proceso de selección y contratación: Un aspecto a considerar durante la selección del personal idóneo para un cargo, debe ser incluir personas con actitud positiva, no reactivos, resilientes. De esta manera habrá menos rotación de personal y se podrá configurar un equipo de trabajo valioso, que se identifique más fácilmente con los valores de la empresa.
- Establecer las brechas de desempeño y dar la formación adecuada para minimizarlas: Formar al personal reviste una gran importancia ya que potencia sus habilidades, lo que favorece la producción en la empresa e inspira a la lealtad, puesto que ven el interés que se tiene en ellos y las oportunidades de crecimiento.
- Hacer que participen de las decisiones: Involucrar al personal en las decisiones hace que se mantenga un nivel de compromiso ante la empresa, se sientan tomados en cuenta y por ende tendrán más confianza. Con una administración o jefes muy rígidos no se logrará satisfacción grupal y creará un clima laboral negativo.
- Recompensar salarialmente en forma adecuada: Tener una política salarial justa, con incentivos y beneficios acordes a la labor, ayudará a la retención de talentos, lo que contribuye al crecimiento empresarial y la creación de la cultura.
- Motivar a los empleados constantemente: Reconocer los logros en forma individual y grupal hará que el trabajador se sienta valioso y contribuirá al logro de la lealtad.
En fin, enfocarse en alinear los objetivos individuales con los empresariales potenciará a los trabajadores, empoderarlos, para dejar que guíen y participen en el crecimiento de la empresa, generará más confianza y lealtad y aumentará la productividad. Sabrás que tienes un equipo leal cuando te siguen prefiriendo como empresa, a pesar de tener otras opciones y se sienten totalmente identificados, conectados y motivados con su lugar de trabajo.